Presentes desde siempre en todas las culturas, sintetizan de forma simbólica la estructura de la vida misma. Los encontramos en distintas construcciones religiosas como en templos de diversas civilizaciones, objetos de culto, libros y, en general en todos los elementos de transmisión de enseñanzas y conocimientos.
Existen diferentes tipos de mandalas empleados para diversos propósitos. En éste contexto los mandalas puden ser pintados en tela, madera, creados con arenas de color, semillas, flores, géneros, etc., ó simplemente visualizados en la imaginación.
En general todos los mandalas tienen significados externos, internos y secretos. En el aspecto exterior representan el mundo en su forma divina, en el interior un mapa mediante el cual la mente ordinaria puede transformarse en la experiencia de la iluminación, y en el aspecto secreto conectarnos con nuestro inconsciente. El trabajo con mandalas equilibra y centra cuerpo, mente y alma.
Pintar, dibujar ó meditar con mandalas, está ligado a las prácticas
espirituales ancestrales. Es considerado, también, una forma de meditación activa.
Fue Carl Gustav Jung, psicoanalista Suizo (1875- 1961), quien descubrió su rol equilibrador al aplicarlos tanto con sus pacientes como con el mismo.
Mandala es una palabra sencilla y fácilmente memorizable. Con este vocablo se designa
todo tipo de imágenes organizadas alrededor de un punto central, desde las más sencillas hasta las más complejas. Niños, jóvenes, adultos, ancianos, todos podemos experimentar la magia de los mandalas!
